Abogados especialistas en negligencias médicas
Índice Artículo
Un concepto de negligencia, podría ser la omisión consciente y voluntaria, de la diligencia a realizar, lo que abarca a los nexos personales, la gestión o guarda de bienes y los actos jurídicos, entre muchas otras cosas. Sería un sinónimo de imprudencia. Este sería el comportamiento de una persona negligente, quien podría habituarse reiteradamente a esta conducta, lo cual es grave si esto afecta a la salud de una persona, porque estaríamos hablando de una negligencia médica.
¿En qué consiste una negligencia médica?
La negligencia médica, es la que se genera cuando el profesional de la salud hace su trabajo, fuera de los estándares o las normas médicas mínimas que se exigen, ya sean por acción o por omisión, produciendo en la mayoría de los casos, un daño al paciente a nivel moral y físico.
Negligencias médicas más comunes
Hay una serie de negligencias médicas que ocurren con mucha frecuencia y estas son:
Retraso innecesario en el diagnóstico de la patología, incluyendo en esto la interpretación errada del mismo.
Perjuicio para el paciente por intervención quirúrgica con consecuencias lesivas para su salud.
Prescripción de medicamentos
Prescripción de medicamentos inconveniente, que puede causar efectos secundarios al paciente.
Atención deficiente u omisión de protocolos.
Falta de cuidados al momento de una transfusión sanguínea, contribuyendo a la transmisión de enfermedades como el SIDA y la Hepatitis.
Incapacidad de alcanzar un resultado prometido mediante operaciones de cirugía estética, como pueden ser las liposucciones, colocación de implantes en distintas partes del cuerpo, entre otras.
Infecciones contraídas en el centro de salud.
Afecciones generadas por el material quirúrgico usado en la intervención, o porque el personal médico lo dejó en el organismo del paciente.
Muerte del paciente por no recibir asistencia oportuna para el resguardo de su salud.
Carencia de información oportuna al paciente sobre el acto quirúrgico a practicar, con sus alternativas y consecuencias posibles.
Supervisión deficiente sobre el paciente, después de la intervención quirúrgica.
En caso de ser víctima de una negligencia médica, ¿qué hacer?
Es una situación en la que cualquier documento relacionado con lo ocurrido, puede tener una gran preponderancia en un reclamo a posteriores. Por ende, es preponderante tener la copia de cualquier documento médico, aunque este no tenga importancia para usted. Si el caso es sobre una lesión que se provocó por negligencia, se deben tomar fotos para constatar la forma en que evoluciona la lesión.
Posteriormente, debe ponerse en contacto lo más rápido posible con un grupo de abogados que se especialice en este tipo de asuntos, para que le orienten y le proporcionen recomendaciones que sean acordes a las circunstancias que está experimentando, porque en algunas ocasiones, los primeros momentos transcurridos luego de la negligencia, son de una gran preponderancia para que el procedimiento jurídico sea exitoso.
¿Cuándo se debe denunciar una negligencia médica?
Antes de denunciar cualquier tipo de negligencia, la persona debe estar bien asesorada por un equipo multidisciplinario, conformados por peritos médicos y abogados, quienes le ayudarán a establecer responsabilidades a las que haya lugar, si en realidad ocurrió el error, lo que pueden expresar con un informe cuyo contenido incluya la valoración de los daños que se produjeron.
En el artículo 1902 del Código Civil, se habla de la obligación de reparar el daño, para preservar la salud del perjudicado si este no ha fallecido. Pero dentro de la responsabilidad médica, se debe señalar que aparte de los daños económicos, se considera que la víctima fue afectada moralmente, físicamente y psicológicamente, algo que en realidad complica determinar su valor pecuniario, porque podemos hablar de disminución física, y sus consecuencias a nivel laboral. Pero dentro de la responsabilidad civil, las consecuencias son puntualmente reparar el daño que se haya causado e indemnizar el perjuicio.
¿Cuáles son los procedimientos a seguir y los plazos de tiempo disponible, para que una persona efectúe un reclamo por los daños que haya sufrido debido a una negligencia médica?
Aquí todo dependerá de un factor fundamental y se trata del sitio en el que ocurra la negligencia, porque no es lo mismo que haya ocurrido en un centro médico público, debido a una equivocación de sus profesionales de la medicina o en una institución sanitaria de capital privado, producto de la omisión de su personal médico.
Si la negligencia sucedió en un centro asistencial público, ya sea un hospital o un ambulatorio, se debe realizar en estos casos una reclamación por responsabilidad patrimonial, la cual se presentará ante la administración sanitaria a la que estos asuntos le competan. Mediante este procedimiento administrativo, se efectúa un reclamo a la administración que haya generado la negligencia médica, para solicitarle una indemnización que corresponda a los daños y perjuicios que provocó su mala actuación.
El afectado puede disponer de un año como máximo para hacer el mencionado procedimiento, a partir del momento en que se haya dado la negligencia médica con la que se produjo la muerte del paciente o su desmejora del estado de salud de esta persona, por una enfermedad, daño o lesión.
No obstante, la víctima puede tener una estabilización o cura, desde que reciba el alta de las lesiones que le hayan provocado, porque ya estas fueron curadas o estabilizadas, pero que se consolidan como una secuela por el resto de su vida. Dentro de este asunto, la complejidad existe cuando se trata de determinar el inicio del plazo de tiempo para ejercer el reclamo, aspecto que debe consultar con su abogado oportunamente.
Pero si el hecho ocurrió en una institución de salud privada, hay que hacer una demanda por responsabilidad civil contra quienes provocaron el daño a la salud del paciente ante los Tribunales de justicia de la jurisdicción civil. Es necesario destacar, que el tiempo de prescripción de este supuesto es de cinco años, si el problema implica una falta a la responsabilidad contractual, pero si la omisión trata sobre responsabilidad extracontractual, el plazo de prescripción es de un año, tiempo que se inicia en ambas causas, desde que ocurre la negligencia médica por la que muera el paciente o experimente un mal estado de salud.
Realizar una reclamación por la vía civil, tiene entre sus ventajas que la mayoría de las sentencias realizadas en los juzgados han sido favorables para el paciente, por lo que es la que más se usa al momento de denunciar la negligencia médica en los sistemas de salud privados.
Eso sí, iniciar un proceso jurídico de este tipo por la vía civil tiene sus inconvenientes, ya que representa una erogación económica más alta, que, si se hace por la vía penal, porque hay que pagar por adelantado tanto al procurador como al abogado y también al perito médico que se encargará de hacer el informe, para que declare en el juicio cuando sea necesario.
Lo otro es que se trata de gastos que no garantizan al denunciante que gane el juicio. Incluso, si esta disputa la pierde quien inició el proceso, pudiera quedar este obligado a sufragar los gastos jurídicos de la parte contraria, representando esto una tercera parte de lo que en la demanda se solicite, propiciando un resultado adverso a nivel moral y económico para quien hace la denuncia de negligencia médica. Es por esto que se debe ser un poco cauto, cuando se interponga una demanda de este tipo, ya que una equivocación puede volver toda una calamidad.
Por la vía penal, también se puede iniciar un reclamo por negligencia médica, lo cual se emprende con una denuncia sencilla en la que se expone lo ocurrido y que se dirija en contra del médico o centro sanitario responsable, aportando en el marco de la misma el parte inicial previo a la lesión y el que indica el estado de salud del paciente, posterior a la negligencia.
Después, el juzgado efectuará la apertura del expediente y enviará una citación al paciente lesionado, para que reciba la visita de un médico forense, quien se encargará de redactar un informe en el que registrará la lesión, los días que esta persona requiera para recuperarse y las secuelas que esto le pudo dejar al individuo. Pero si la negligencia ocasionó la muerte de la persona, su pariente más cercano puede solicitar la autopsia mediante un médico que haya recibido la autorización de la familia, cuyos resultados determinarán la causa por la que sucedió el fallecimiento, y si el motivo de la muerte de la persona hace alusión a una negligencia médica, se puede allanar el camino para la interposición del reclamo contra quien causó el error.
Con la confirmación de la equivocación médica, el demandante será convocado a un juicio contra el negligente, quien está a riesgo de recibir una condena penal que puede implicar una estadía tras las rejas o una prohibición para el ejercicio de sus actividades y se podrá pedir una indemnización por las lesiones que se produjeron, ya sean psicológicas o físicas
En ese juicio, aparte de la condena penal (el tiempo de cárcel o de prohibición para ejercer su actividad), se exigirá una indemnización por las lesiones (ya sean físicas o psicológicas), que previamente debieron ser mencionadas por el médico forense y el abogado le dirá al demandante cuando puede exigir económicamente como indemnización.
La vía penal es la más indicada, si se trata que el paciente sufrió por la negligencia médica, una lesión grave o la muerte. Es una forma económica y rápida, que sirve para conseguir una indemnización, aparte que se puede lograr una condena de prisión o que inhabiliten al médico para el ejercicio de su profesión. Y en caso que el demandante pierda el juicio y el acusado termine absuelto de los cargos que se le hayan imputado, el juez no exigirá a quien haya iniciado la demanda que asuma los gastos derivados del juicio.
Y otra ventaja, es que no se necesita contratar a un médico para que intervenga y declare a favor del demandante, ya que solamente basta comprobar la documentación médica presentada y que el médico forense designado por el juzgado revise el caso.
Pero entre los inconvenientes de la vía penal, nos encontramos que en el sector de la salud hay un corporativismo muy fuerte, mientras que los jueces suelen ser renuentes al momento de establecer una condena penal a un médico.
¿Qué es lo que se puede reclamar a modo de indemnización?
Esto es algo que puede englobarse en dos tipos de daños
A.- Personales: Comprenden una serie de afecciones que atentan contra la integridad física del afectado. Podemos empezar con las lesiones permanentes, indiferentemente que estas queden estabilizadas o que persistan en el organismo como una secuela de la negligencia médica que sufrió el individuo.
Además, se puede pedir una indemnización por incapacidad temporal, producto del tiempo en que las lesiones causadas debido a la equivocación médica, se han tardado en estabilizar o curar. Por último, tenemos al daño moral, siendo este la fuente de aflicción espiritual o física, así como la angustia, el dolor y cualquier otro padecimiento que a la víctima se le hizo por este evento negativo y que puede extenderse a sus familiares cercanos, preocupados por el estado de salud de la persona perjudicada por el acto de negligencia médica.
B.- Materiales: En este ámbito, se puede solicitar una indemnización por el daño emergente, que serían las erogaciones económicas que la víctima debió afrontar por la negligencia médica que padeció. Estos gastos se representan a modo de rehabilitación física, otras intervenciones quirúrgicas, adquisición de medicinas, traslados por diversos medios de transporte, entre otros. También, tenemos al lucro cesante, que alude a la pérdida de capacidad económica o poder de adquisición de la persona a la que perjudicaron con la negligencia médica.
El perito médico y su importancia para resolver estos inconvenientes
Para conseguir una responsabilidad por negligencia médica de parte de un médico, es necesario contar con un perito que tenga experiencia en la materia, quien se encargará de estudiar en una primera instancia la documentación médica, para determinar si existió una situación de negligencia y en caso de ser cierta, emitirá un informe pericial cuyo contenido explicará el vínculo entre las omisiones o errores médicos y el daño que la víctima sufrió a raíz de los mismos. Con este informe, se expresa un argumento técnico del caso en cuestión para esgrimirlo en el juicio.
Al corporativismo médico hay que enfrentarse
Muchas veces es complicado conseguir una condena, a menos que el caso de negligencia médica se haya constatado en flagrancia. Esto sucede porque dentro del sector médico se defienden entre ellos para preservar sus intereses, lo que es propio de una postura corporativista. De hecho, hay galenos que deciden justificar alguna práctica de la que se deriva un inconveniente de salud para el afectado, tomando en cuenta el porcentaje de riesgo que implica una intervención quirúrgica a problemas de salud que el enfermo no declaró. En estas situaciones, vale la pena buscar a un abogado especialista en estos casos, para que te oriente al respecto y determine lo que debas denunciar.
Es posible que el médico forense sea renuente a llevar a juicio la práctica de algún colega, algo que se puede evitar agregando a los informes oficiales un peritaje médico particular, es decir, tener el informe hecho por un médico que el denunciante haya contratado, con el que se confirme el error en el que el profesional de la medicina haya incurrido.
Una cosa muy preponderante, es que, en España, los médicos están obligados a contratar a través de una empresa de seguros, una póliza de responsabilidad civil, con la que responderán monetariamente por las equivocaciones generadas con su práctica de la medicina, bien sea de manera particular o por el Colegio de Médicos.
Debes tener bien claro si te conviene hacer la denuncia o no
En fin, antes de emprender un proceso judicial, debes pensar bien lo que harás (con la asesoría de un abogado, por supuesto), y saber de antemano lo que te puede costar a nivel económico, aunque esto no implica que todo te saldrá como esperas.
Una de las cosas que debes analizar, es la indemnización que pudieras conseguir, y compara la suma en dinero con lo que te costará económicamente el reclamo. Es aquí si sabrás que tan factible puede ser denunciar por negligencias médicas, porque, por ejemplo, en un juicio emprendido por la vía civil, solamente lograrás que la contraparte te pague todo, si ganas al 100% en el proceso, es decir si el juez llega a favorecerte en todas las cosas que solicitas.
Por eso, es bueno pensar las cosas antes de hacerlas, sobre todo porque en España no existe un criterio a nivel de jurisprudencia, que ajuste las indemnizaciones a parámetros que sean sensatos dentro de las sentencias judicial, para que el paciente consiga una suma económica satisfactoria y, lo más importante, restaure a cabalidad su salud.